Activan Plan Nacional de Lectura en Magallanes

Jueves 03 de Diciembre, 2015

Ante docentes, encargados de bibliotecas CRA, equipos directivos, comunidades educativas: padres, apoderados y alumnos, se ha desplegado una vasta campaña desde la Secretaría Regional Ministerial de Educación de Magallanes y Antártica Chilena para dar a conocer el Plan Nacional de la Lectura 2015-2020, que se inscribe en un proyecto de cambio social, cultural y de participación para concretar y fortalecer una política pública de lectura.

La Seremi de Educación, Margarita Makuc explica que la visión de este Plan es “hacer de Chile un país donde se garantice la lectura como un derecho social para todos sus habitantes y su misión, reconocer y visibilizar la lectura como derecho y práctica que contribuye a acortar las brechas sociales y culturales dentro del país, promoviendo el acceso a diversas prácticas y soportes de la lectura a lo largo de todo el ciclo de vida y formando personas informadas, críticas, creativas, reflexivas y participativas”.

La idea es favorecer el ejercicio del derecho a la lectura, en todos los formatos y soportes, propiciando y visibilizando la participación ciudadana en la implementación del Plan Nacional de la Lectura y en los Planes Regionales de la Lectura.

La autoridad regional indica que el Plan incluye “propiciar la participación constante de la comunidad en las acciones y los programas, las cuales posibiliten un acceso equitativo de las personas a materiales, espacios y encuentros de lectura. Incorporar y fortalecer la diversidad cultural en la implementación del Plan Nacional de la Lectura. Apoyar y visibilizar la participación ciudadana en la planificación y elaboración de Planes Regionales de la Lectura, con la finalidad de incorporar las diversas realidades regionales y dar respuesta a las necesidades locales”.

 

Para ello se han trazado las siguientes Metas: Alcanzar el 100 % de Planes Regionales de la Lectura diseñados y en implementación en cada una de las regiones del país. Aumentar en un 10 % la población que declara leer libros en formato impreso, por motivos de estudio o trabajo o por entretención u ocio. Aumentar del 26 % al 28 % la población que declara leer libros en formato digital. Y mejorar la ubicación que ocupa la lectura entre las actividades habituales en el uso del tiempo libre de las personas